En la escuela Patrón Costas de la ciudad de Orán, ayer se intoxicaron por la mañana 21 niños en total, pertenecientes a sexto B, séptimo grado y algunos de segundo grado. Por este motivo, las autoridades decidieron suspender las clases del turno tarde y las de hoy, en vísperas de un fin de semana extralargo por los homenajes a Güemes y el Día de la Bandera.
Casi todos los niños afectados, quienes estuvieron internados con dolor de panza, náuseas y vómitos en el área Materno Infantil del Hospital de Orán, fueron dados de alta tras recuperarse y dejar muestras biológicas para análisis, cuyos resultados dijeron que estarían la semana próxima.
Lo que pocos logran comprender, tras un paro que comenzó hace más de un mes y se acaba de levantar, es la nueva suspensión de las actividades escolares por un evento que afectó a menos del 1% de la matrícula de la escuela. Al parecer, la medida "de cajón" en las escuelas públicas es suspender el dictado de clases.
Si bien aún no se sabe qué pudo indigestar a 21 alumnos de la escuela Patrón Costas, quienes desayunaron té con pan, aunque el alimento se denomina "copa de leche", desde el hospital informaron que todos superaron el cuadro y que se trabaja para determinar qué fue lo que les provocó la intoxicación.
Ayer, autoridades sanitarias y de Bromatología trabajaron en la cocina de la escuela, en los alimentos que consumieron los niños e inspeccionaron el kiosco escolar. Tomaron muestras y se aguardan los resultados, ya que las muestras se enviaron a Salta capital para su análisis.
Fuentes hospitalarias revelaron en off que "al aparecer no hay nada a primera vista en los análisis de los niños afectados, pero se deben ver todas las posibilidades".
El evento generó gran preocupación en la comunidad, y tanto las autoridades educativas como sanitarias se encuentran trabajando en conjunto para investigar la fuente de la intoxicación y prevenir futuros eventos similares.