Narcotraficantes de Salta, Chaco, Mendoza y Córdoba fueron descubiertos por personal de la Gendarmería Nacional Argentina. Los uniformados siguieron una minuciosa investigación que les permitió detener a 13 personas y el desbaratar la importante organización narco.

En marzo de este año una camioneta fue interceptada con estupefaciente, en abril cayó un camión que transportaba droga, de forma paralela continuaron con la investigación y lograron identificar a todos los eslabones de la banda. Luego de distintos allanamientos en diferentes provincias, desarticularon la organización. Cocaína, marihuana, dinero en efectivo, vehículos y otros elementos de interés para la causa fueron secuestrados. Los últimos procedimientos tuvieron lugar en Salta y Córdoba.

En el marco de una investigación llevada a cabo por personal del Centro de Reunión de Información Córdoba, dependiente de la Agrupación XX Córdoba, con intervención del Juzgado Federal 1 de esa provincia, a cargo de Ricardo Bustos Fierro, Secretaría Penal a cargo de Facundo Troncoso, se logró individualizar a dos ciudadanos cordobeses que integraban junto a otros de las provincias de Chaco y Salta, una organización criminal dedicada a la obtención, almacenamiento, transporte y distribución de drogas.

Las pesquisas permitieron que el magistrado interviniente hiciera responsables a los investigados por el secuestro de 60 kilogramos de marihuana en la localidad chaqueña de la Leonesa, y que tuviera lugar en el mes de marzo, quedando detenidos el transportista y su proveedor.

Más acciones delictivas

La banda continúo con las acciones delictivas, es así que en abril los gendarmes lograron interceptar un camión que transportaba más de 50 kilogramos de cocaína y 25 kilogramos de marihuana desde Salvador Mazza con destino la ciudad de Córdoba.

Como resultado fueron detenidos los dos ciudadanos que realizaban el transporte y luego cuatro más que hacían de nexo entre los suministradores y los organizadores.

Continuando con la investigación, se detectó que otros integrantes de la red delictiva estaban prófugos entre ellos una mujer de Bolivia que tenía contactos en el vecino país para la adquisición de la droga y que también era parte del último transporte. La mujer empleaba distintos "documentos apócrifos" para poder transitar en territorio nacional y así cometer sus actividades ilegales junto a un nuevo socio.

Los investigadores de la fuerza detectaron que la mujer nuevamente se encontraba inmersa en la obtención de cocaína desde Bolivia para su posterior distribución en Mendoza y Córdoba. Para ser exitosa, había empleado a un hombre quien se encargaba de controlar a personas que oficiaban de "mulas", para el transporte del estupefaciente. Una vez en Córdoba, un "colaborador" los recepcionaba y la distribuía desde un punto geográfico a otro.

La detención

Con todas las acciones demostradas, y por disposición del juzgado interviniente, a fines de septiembre, en el marco del Programa de Terminales Seguras y en coordinación con el Comando Unificado Federal de Recaptura de Evadidos (Cufre), se detuvo a la ciudadana y su "socio".

Asimismo quedaron a disposición de la Justicia otras dos personas más.