El letrado y sacerdote español Javier Belda Iniesta indicó que a su defendido se lo acusa de “abrazos que duran más de lo normal, besos que en lugar de la mejilla pueden caer en la oreja o el cuello y chistes subidos de tono”.

El ex Obispo de la diócesis de Orán, Gustavo Zanchetta, se presentó ante la jueza María Laura Toledo Zamora para ratificar su domicilio procesal y confirmar quién sería su abogado defensor.

“No había ningún elemento por el cual tuviera que prestar declaración”, aclaró el letrado que representa a Zanchetta, el sacerdote y abogado español Javier Belda Iniesta.

Antes de la llegada del obispo emérito la Fiscalía pidió su captura internacional alegando que estaba en rebeldía al no responder llamados o mails en las direcciones que él mismo había proporcionado a la Justicia. En este sentido, Belda Iniesta manifestó que “la Fiscalía no puede requerir que responda a llamados o mails, es el Tribunal el que tiene que notificar y la citación que le llegó no especificaba que tendría que confirmar su recepción”.

Luego agregó que “no había indicios ni pruebas de que Monseñor Zanchetta no se iba a presentar a esta citación”.

Por otro lado quiso dejar claro que en ningún momento la jueza Toledo Zamora dictó la captura internacional del ex obispo de la diócesis y que solo se trató de un pedido de la Fiscalía que no tuvo lugar. “La jueza es la única que puede dictar la orden, pero no la dictó”, expresó el letrado.

Asimismo cuestionó las medidas solicitadas por la Fiscalía penal de Violencia de Género y Delitos contra la Integridad Sexual de Orán, a cargo de María Soledad Filtrín. “La fiscalía pide medidas que pueden parecer reiterativas. Vamos a considerar que la fiscalía esta animada por un interés que florezca la verdad”, apuntó y agregó que “estas medidas se solicitan cuando el sujeto acusado está en riesgo de fuga pero Zanchetta ha colaborado cada vez que se lo solicitó”.

Sobre el delito que se le imputa, abuso sexual simple continuado agravado por ser cometido por un ministro de culto religioso reconocido, el abogado dijo que las acusaciones son solo de carácter “perceptivo”  o “interpretativo”.

“Zanchetta no está acusado de violación, es abuso sexual simple y esto entra dentro del ámbito de la percepción o de la interpretación”, indicó Belda Iniesta y completó: “Se lo acusa de abrazos que duran más de lo normal para quien lo acusa, besos que en lugar de la mejilla pueden caer en la oreja o el cuello, chistes subidos de tono, pero es muy distinto a una violación”.

Además criticó a los métodos utilizados para la realización de pericias psicológicas. “Estos test se califican como pseudociencia desde hace quince años” dijo.

Luego de reafirmar la inocencia de su defendido indicó que Zanchetta volverá a Roma a la espera de que continúe el proceso judicial.