A raíz de distintos operativos que se llevaron a cabo no solo por las fuerzas nacionales de seguridad sino también por distintas organizaciones tendientes a prevenir y combatir la trata de persona en sus distintas modalidades, más de 100 trabajadores rurales fueron rescatados luego de haber estado en condiciones infrahumanas. En nuestra edición del martes último informábamos acerca del hecho en el que hasta ese momento se sospechaba que entre el numeroso grupo de laburantes podían encontrarse ciudadanos salteños. Efectivamente, ayer desde la Gendarmería Nacional Argentina confirmaron que tres menores y un mayor fueron trasladados desde San Juan a su ciudad de origen, San Ramón de la Nueva Orán.

Los ciudadanos regresaron a sus respectivos hogares en la ciudad salteña de Orán luego de haber estado trabajando en condiciones insalubres. El martes, en horas de la mañana, los efectivos del Escuadrón Núcleo «San Juan», por disposición del Juzgado Federal 2 y el requerimiento de la Dirección de Niñez y Familia de esa provincia, efectuaron el acompañamiento y traslado de cuatro personas hasta Salta.

Los tres menores y un mayor de edad, fueron rescatados la semana pasada en el marco de una causa por infracción a la Ley N´ 26.842 tras el registro de un inmueble ubicado en la localidad de Media Agua. Para efectuar un retorno seguro, del operativo participaron distintas Unidades de la Fuerza. Al llegar a Orán, la Secretaria de Primera Infancia, Niñez y Familia junto a personal de la Oficina de Rescate y Acompañamiento a Personas Damnificadas por el Delito de Trata dependiente de la Secretaría de Derechos Humanos realizaron las evaluaciones pertinentes a las personas rescatadas, quienes luego fueron acompañados a sus respectivos hogares.

Hacinados

En San Juan, «en la zona de Sarmiento se detectaron 140 trabajadores traídos desde el norte del país por personas sin escrúpulos para la cosecha del olivo», según informó el secretario general de la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (Uatre), José Voytenco, a través de un comunicado.

El dirigente agregó que esas personas «estaban viviendo en condiciones infrahumanas y de extrema vulnerabilidad, entre los cuales había 11 niños. Dormían hacinados en boxes de dos metros por uno y medio, sin agua potable, sin baño y varios de los trabajadores habían contraído sarna. A esta altura de la historia hay quienes dicen que exageramos cuando decimos que hay explotación laboral y trata de personas en el campo», sostuvo.