Con un golazo del Diablito Echeverri, River superó a Nacional y sigue creciendo en la Copa Libertadores
El equipo de Martín Demichelis fue ampliamente superior al Bolso y continúa a paso firme en el certamen internacional.
Lo clásico no pasa de moda. Como las películas ochentosas, las series de los 90’ que se mantienen en los servicios de streaming y el 4-3-1-2, ese dibujo que marca la historia de River y que le dio una satisfacción total a todo Núñez en la primera noche copera del año en el Monumental. Porque Martín Demichelis dejó de lado los experimentos, puso cada pieza en su lugar y el bombazo teledirigido del Diablito Echeverri y el cabezazo de Colidio le permitieron a River superar a un duro Nacional de Uruguay, sumar puntaje ideal en el grupo H y, de yapa, superar a Boca en el ranking y quedar en el umbral de la clasificación al Mundial de Clubes 2025.
“Martín, basta con tres delanteros. Por Dios te lo pido. Es Solari y Borja, nada más”. Como le reclamó el hincha ubicado en la Centenario baja inferior post victoria ante Central, Micho puso un 11 de entrada que después de mucho tiempo no generó discusión. La heladera en la cocina y Villagra de #5. La ducha en el baño y Echeverri de enlace. La cama en la habitación y Solari -recuperado de una fatiga muscular-, suelto en ataque como compañero de Borja. Y así, River abrió el Bolso y lo llenó de fútbol, exigiendo a Mejía antes de los 10’ con Solari y Aliendro. Pero el panameño nada pudo hacer ante el remate de Echeverri, que juega su primera Libertadores como si fuera lo última. Literal. Así, después de cambiarle la cara al equipo en Táchira, Sanabria le miró siempre el número y con sus giros repentinos, gambetas y toques de primera, inició cada ataque en el primer tiempo hasta bajar la intensidad en el segundo (lo reemplazó Lanzini), a la par de un equipo que fue sintiendo el desgaste y le mantuvo al Tricolor la esperanza del empate más por la mínima ventaja que por juego.
Además del resultado, las buenas noticias tuvieron nombres propios y se tradujeron en aplausos. Porque Pirez se bancó a dos tanques como Ebere y Carneiro, Nacho Fernández salió ovacionado, Villagra fue de menor a mayor y Rodrigo Aliendro se pareció bastante al que fue figura en la Liga Profesional 2023, con quite, despliegue y llegada al área con un casi gol.
Esta vez sin Borja como protagonista, otras señales positivas fueron el despliegue de Herrera y aunque le costó con el tándem Lozano-Galeano, la zona preferida de Nacional para atacar, Enzo Díaz cumplió. Y claro, como en cada partido, siempre hay una atajada salvadora de Armani y hasta Colidio se sacó las ganas de convertir.
Colidio se sacó las ganas de convertir. EFE/ Juan Ignacio Roncoroni
Con la puntada final como aspecto a corregir porque debió ganarlo por más diferencia y cerrarlo antes, River dio un pasito más en la Libertadores y llega bien a Alta Córdoba para buscar el boleto a cuartos de la Copa LPF. Todo porque Demichelis apostó a un modelo lógico, práctico y clásico.